Nota publicada por EL TIEMPO – 15 de octubre de 2019

Únete al reto de la FAO y EL TIEMPO en la semana de la alimentación saludable y mejora tu dieta. 

 Dicen que tienen sabor a pollo, pero ¿realmente es pollo?
– Afirman que no tienen azúcar, ¿qué tan cierto es?
– Se lee en sus empaques que saben a fruta, ¿será que sí tienen fruta?

Si de mentiras se trata, el primer gran engaño tras los paquetes es usar la palabra alimentos para nombrarles, ya que debido a su forma de elaboración industrial se han denominado productos procesados y ultra procesados (comestibles procesado/ultra procesados).

Su aspecto, composición y sabor es el resultado de la adición de una serie de sustancias que le dan apariencia, olor y color de los alimentos, sin esto implicar que realmente lo sean.
Algunos mitos y verdades:

* No son saludables: es importante entender que estos contienen, según sea el caso, azúcares añadidos, grasa o sal (sodio), ingredientes que conducen a la aparición de enfermedades crónicas como la diabetes mellitus, enfermedades cardiovasculares, obesidad, entre otras.

*No contienen ‘saborizantes naturales’:   adiciones como el sabor a pollo o a limón no son derivados de alimentos, sino de sustancias que pretenden semejar sus sabores.

*No tienen vitaminas naturales: en su composición se incluyen vitaminas sintéticas que en ningún momento reemplazan las vitaminas y los nutrientes que se encuentran en los alimentos naturales.

*La letra pequeña importa: la información nutricional se presenta de una manera que no es comprensible para el consumidor, con letra pequeña y cifras en porcentajes del valor diario que por lo general no son entendibles para los usuarios.

*Que duren, no significa saludables: la comida fresca y natural se pueden deteriorar en tiempos cortos, en cambio los productos procesados y ultra procesados tienen una vida útil demasiado larga. Esto se debe a que tienen adición de preservativos químicos.

* El número de porciones hace la diferencia:  fíjese muy bien en el número de porciones que tienen los empaquetados, casi siempre son elaborados para dos, tres, cinco, seis, ocho porciones, esto quiere decir que usted, no puede consumir solo ese producto.

* Las promociones no son un “ahorro” para su salud: a pesar de que se presenten en “promoción” de pague uno y lleve dos, no suelen ser más económicos que productos frescos  como las frutas.  

Recomendaciones de los expertos

El consumo de estos productos –entre ellos los paquetes- es una de las causas que conducen a la aparición de enfermedades crónicas no transmisibles como el sobrepeso, la diabetes, enfermedades cardiovasculares, etc.

Según la Encuesta Nacional de Situación Nutricional (ENSIN 2015), este consumo ha ido aumentando consecuencia de factores como la globalización, el cambio climático, el desplazamiento de los habitantes del campo hacia la ciudad y, con ello, el envejecimiento del campo y la disminución en la producción.

El resultado es que actualmente el 56% de la población adulta y el 25% de la población de niños en edad escolar presenten exceso de peso.

Aunque estos productos cumplen con todas las normas técnicas y sanitarias en su elaboración, en las manos del consumidor está la decisión de comprarlos o no, lo cual hace importante el estar bien informado.

Teniendo en cuenta estos puntos, desde la FAO es importante hacer una invitación a construir hábitos saludables desde la casa, el colegio o en el trabajo.

Además incluir en su día a día acciones como:

• Incluir frutas en las loncheras de los niños y en los refrigerios de su jornada laboral
• Ofrecer en sus fiestas pasabocas naturales (queso, trozos de frutas o verduras que puede acompañar con salsas preparadas en casa).
• Hablar en el colegio de sus hijos para que se fomente el consumo de frutas.
• Dar ejemplo, coma alimento frescos frente a sus hijos.
• Acostúmbrese a llevar agua y alguna fruta cuando salga.
• Fomentar en sus hijos el consumo de agua, leche, jugos naturales sin adición de azúcar.
• Consumir los alimentos naturales, dígale ¡No! a los desperdicios de alimentos.

El reto de hoy: ¿Qué llevó  de comer al trabajo o al colegio?

Esta semana de la alimentación Saludable, EL TIEMPO y La FAO lo invitan a unirse a #QuéTeComes en busca de mejorar los hábitos saludables. Durante esta semana publicaremos varios sencillos retos,a través de estos artículos y en las redes sociales de EL TIEMPO que invitan a mejorar los hábitos alimenticios familiares.  La persona que complete todos los retos, o la mayor cantidad de ellos, recibirá como premio un taller sobre nutrición que se dictará en las instalaciones de FAO en Bogotá.

2 respuestas

  1. Respecto al consumo masivo de elementos procesados creo que la gente lo hace porque es mas ‘barato’ que otras opciones como: alimentos integrales, productos veganos y así, no debería ser excusa pero en la escuela de mi hijo muchas madres comentan que el factor dinero es importante y por eso se dificulta llevar una dieta saludable.

  2. La verdad que entre un zumo natural y uno comprado la diferencia es abismal, la cantidad de componentes extra que le agregan y no hay ni uno bueno!

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