Por: Portafolio

Con la implementación de este tributo se busca desincentivar el consumo de productos que contengan exceso de azúcar, grasas y sodio.

Con la puesta en marcha de los llamados impuestos saludables, se busca promover la adopción de mejores hábitos y desincentivar el consumo de alimentos que contengan exceso de azúcar, grasas y sodio. 

En el caso de los productos comestibles, este tributo se aplicará de manera gradual. Empezando con una tarifa de 10 % en el 2023, de 15 % en el 2024 y de 20 % a partir del 2025. 

(Lea más: ABC del impuesto a ultraprocesados que empieza a regir en noviembre)

Así las cosas, según ha explicado el Ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, la nueva medida solo tiene efecto sobre 21 artículos de los 443 que componen la canasta básica del Índice de Precios del Consumidor (IPC), con la cual el Dane mide la inflación. 

Es decir, que no se tendrán en cuenta frutas, verduras, tubérculos, leche, carnes, huevos, pescado, granos y pan. Además, están exentos otros productos como las obleas, el salchichón, la mortadela, el arequipe y el bocadillo.  

El Minhacienda también ha indicado que este impuesto tiene en miras que las empresas reduzcan estos ingredientes (azúcar, sodio y grasas) de su oferta. “El objetivo del impuesto es decirle a las empresas modifiquen su oferta y decirle a los consumidores que consuman más sano”, agregó.

Atento al etiquetado

Para evitar confusiones con respecto a los artículos que entran en esta normativa, Oliver Pardo, director del Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana, explica que una forma de identificarlos es fijándose en el etiquetado nutricional. 

Lo anterior, teniendo en cuenta que los productos gravados serán aquellos comestibles ultraprocesados que, como ingredientes, se les haya adicionado azúcares, sal/sodio o grasas suficientes para llevar el sello frontal establecido por el Ministerio de Salud. Un ejemplo de esto, son las golosinas y las frituras.

Estos stickers de advertencia indican que un alimento tiene cantidades cuyo consumo en exceso puede representar un mayor riesgo para la salud. Estos se pueden reconocer como un símbolo octagonal con fondo negro.