NOTA DE ASUNTOS LEGALES 17-02-2023/ FOTO DE COLPRENSA

El magistrado de la Corte Constitucional se declaró impedido para decidir sobre una de las demandas a la Reforma Tributaria

El magistrado de la Corte Constitucional, Alejandro Linares, se declaró impedido para decidir sobre una de las demandas que ha tenido la Reforma Tributaria de Gustavo Petro, aprobada el año pasado por el Congreso.

Aunque es común que los magistrados se abstengan de decidir sobre algunos de estos temas clave por algún compromiso político o de negocios que tengan relacionado, el caso del magistrado Linares es algo inusual ya que argumentó que no puede pronunciarse sobre los impuestos a las bebidas azucaradas, uno de los más polémicos de la Tributaria, por padecer de diabetes, lo que le impediría actuar de manera imparcial.

La demanda a los denominados impuestos saludables fue interpuesta en el alto tribunal por la ciudadana Miryam Elfreide Anaya, y por reparto, le correspondió al magistrado Linares para ser ponente.

Linares argumentó en un documento de dos hojas, que padece de la enfermedad de diabetes mellitus tipo 1 (DM1) desde 1977, por lo que si hace cualquier pronunciamiento que tenga relación sobre el tema del impuesto a las bebidas con alto contenido de azúcar podría llegar a considerarse que hay un conflicto de intereses.

“Considero pertinente poner a consideración de la Sala Plena la antedicha situación para que determine, de acuerdo con su competencia, si el impedimento acá presentado resulta fundado, en tanto la circunstancia precedente podría enmarcarse en la causal de ‘tener interés en la decisión’”, explicó el magistrado a sus compañeros de corporación.

Ahora, los demás magistrados de la Corte Constitucional deberán determinar si padecer de diabetes, enfermedad en la que los pacientes tienen prohibido consumir azúcar, es argumento suficiente para que el magistrado se declare impedido de hablas sobre los nuevos impuestos a las bebidas azucaradas.

La reforma tributaria, que busca recaudar alrededor de $20 billones, empezó a regir a partir de este año. La Dian ya indicó los plazos en los que se deben empezar a pagar estos impuestos a los alimentos ultraprocesados y con alto contenido de azúcar.

El impuesto a las bebidas azucaradas se fijó para tener tarifas desde este año, y aumentará progresivamente en 2024 y 2025. Para 2023 y el otro año, las bebidas que contengan menos de seis gramos de azúcares añadidos no pagarán impuesto, según quedó en la iniciativa.

Pero los que tengan azúcares añadidos entre los seis y 10 gramos, el impuesto será de $18 para 2023 y de $28 para 2024. Si la bebida tiene más o igual a 10 gramos pagará un gravamen de $35 y $55 para este año y el otro, respectivamente.

A partir de 2025, las bebidas de hasta cinco gramos de azúcares añadidos serán las que no paguen este impuesto. Pero las que contengan entre cinco y nueve gramos, el impuesto será de $38. Igual o más de nueve gramos, el gravamen será de $65.

La Reforma Tributaria sigue sumando demandas en su articulado y la Corte Constitucional ya ha recibido más de 14 en los pocos meses que lleva este año.

Entre las normas demandadas también está la prohibición de que las petroleras deduzcan las regalías del impuesto de renta y la contribución para beneficiar a los estudiantes que financian sus estudios con crédito reembolsable con el Icetex.