NOTA DE EL UNIVERSAL 16-02-21/ FOTO DE FREEPIK

Sí, sí son necesarias. Las etiquetas nutricionales pueden convertirse en un instrumento eficaz para ayudar a los consumidores a elegir alimentos saludables.

En Colombia, el regreso a clases parece sinónimo de compras de loncheras de papas fritas y alimentos con altas cantidades de azúcar.

La Encuesta Nacional de Salud Escolar, del Ministerio de Salud y Protección Social 2018, señala que el 67% de madres, padres y cuidadores están de acuerdo con limitar las ventas de productos ultraprocesados y bebidas azucaradas en los entornos escolares.

RedPaPaz también se encargó de hacer el ‘Estudio de actitudes, percepciones y comportamientos frente a políticas públicas para proteger el derecho a la alimentación adecuada’, y encontró que, en los colegios, la oferta de productos ultraprocesados es hasta tres veces más alta que la de frutas.¿Por qué es importante?

Faiber Jaramillo Yepes, docente de Nutrición y Dietética de la Universidad CES, explica que la ley de etiquetado nutricional frontal, que camina en Colombia desde fines del 2020, “busca que el consumidor tenga una consciencia mayor en su decisión de compra, dado que podría reconocer fácilmente cuando un producto aporte una cantidad alta de sodio, (sal) de azúcares o de grasas, especialmente aquellas que son saturadas. En un mediano o largo plazo podemos ver los efectos positivos que se tendrán en la salud, en la disminución del riesgo de enfermedades crónicas no transmisibles y por tanto en todo el sistema de salud colombiano”.

Si bien, dice el experto, los resultados no son inmediatos, “claramente, si no se hacen estos etiquetados, la población va a seguir pagando un precio muy alto”.Malnutrición en cifrasSegún cifras recogidas por RedPapaz, 8 de cada 10 niños entre los 13 y los 17 años consumen productos de paquete en exceso, y 3 de cada cuatro consumen bebidas azucaradas una o más veces al día. Asimismo, ha aumentado el sobrepeso en la población escolar en Colombia, pasando de un 13% en 2005, a un 18% en 2015. Así, la Ley Escuela Saludable PL 168C busca que niños y adolescentes forjen hábitos saludables a lo largo de sus vidas, y reciban una alimentación saludable en la escuela que favorezca su adecuado desarrollo. Se busca que los productos agrícolas del campo colombiano vayan directamente a los colegios, y a las preparaciones propias de la región.